sábado, 12 de julio de 2014

¿Qué son los loquios?

alejandrofatouh.blogspot.com
Los loquios (o lochia) y los entuertos son dos mecanismos naturales, de evacuación y contracción
respectivamente, que se producen tras el parto durante la etapa conocida como puerperio.

Su función principal es la de ayudar en un primer instante a evitar la hemorragia postparto y que el útero retorne a su estado normal tras las modificaciones sufridas como consecuencia del embarazo y del parto.

Los loquios son secreciones vaginales que contienen sangre, moco cervical y restos de placenta. Se producen porque despues de cualquier tipo de parto, ya sea cesarea o parto normal, el utero comienza a volver a su tamaño natural y necesita eliminar los restos de embarazo.

Los loquios suelen durar entre 4-6 semanas coincidiendo con el periodo conocido como puerperio o cuarentena aunque a veces pueden alargarse un poco mas dependiendo de lo que las hormonas tarden en volver a la normalidad.

Los loquios pasan por tres estadios o etapas:

  • Lochia rubra (loquios rojos), es el primer flujo después del parto, de color rojizo por la presencia de sangre y, por lo general, no dura más de 3 a 5 días después del alumbramiento (puerperio inmediato). Puede fluir contínuamente o por intérvalos y puede que contenga coágulos, en especial si la nueva madre ha estado acostada por un tiempo.
  • Lochia serosa (loquios serosos), despues de la lochia rubra, es menos espesa y cambia a un color pardo, marrón claro o rosado. Contiene un exudado seroso de eritrocitos, leucocitos y moco cervical. Esta etapa continúa hasta el décimo día después del parto (puerperio mediato).
  • Lochia alba (loquios blancos), comienza cuando el flujo se vuelve blanquecino o amarillento claro. Típicamente dura hasta la tercera o sexta semana después del parto (puerperio tardío). Contiene menos glóbulos rojos y está compuesto casi totalmente de glóbulos blancos, células epiteliales, colesterol, grasas y moco.

Existen algunos factores que pueden influir en un incremento de los loquios, como el embarazo múltiple, multíparas (que han parido anteriormente), fetos muy grandes (macrosomas) o una gestación con gran cantidad de líquido amniótico (polihidramnios). En todos estos casos el útero queda más distendido, por tanto necesitará más esfuerzo para contraerse y los loquios suelen prolongarse un poco más.  

Por el contrario, hay una circunstancia que favorece que estos loquios puedan acabar antes: la lactancia. La razón se encuentra en el reflejo de Ferguson. Cuando se pone el bebé al pecho y se agarra bien, la succión provoca un reflejo en la hipófisis de la madre que segrega oxitocina. Esta hormona estimula el útero y hace que se contraiga, favoreciendo la reducción del sangrado y la involución del útero, es decir, el que este órgano vuelva a la normalidad.

Por lo general, es una secreción que huele similar al olor del flujo menstrual. Un olor fétido de los loquios puede indicar una posible infección, como una endometritis, por lo que deberias ponerte en contacto con tu profesional de salud. Tambien pueden ser signos de infeccion el dolor en la parte baja del abdomen y el que el sangrado sea demasiado abundante o si se vuelve de repente rojo intenso. .

Durante la cuarentena es mejor evitar los tampones para prevenir infecciones. Se aconseja emplear compresas de algodón y cambiarlas a menudo.

miércoles, 2 de julio de 2014

Displasia de desarrollo de la cadera (III)

El TRATAMIENTO de la displasia de desarrollo de cadera (DDC) dependerá de la gravedad y de la edad de su niño.

Los casos leves mejoran sin tratamiento alguno después de varias semanas. Los casos más graves necesitarán tratamiento.

Existen diferentes tratamientos para los bebés, entre los que se incluyen:

mibebekoala.wordpress.com
Si la displasia es media o grave se suelen utilizar prótesis blandas o rígidas u otros tipos de ortesis como el ARNES DE PAVLIK. Este arnés consiste en un conjunto de correas suaves que mantienen a su niño en “posición de rana”. Se utiliza en bebés de hasta 6 meses de vida para sostener la cadera en su lugar, al mismo tiempo que permite un movimiento restringido de las piernas. La posición mantenida hace que los ligamentos se fortalezcan y se desarrolle  un acetábulo (agujero del hueso de la cadera). Usualmente una cadera luxada llega a reducirse , en caso contrario  esta debe efectuarse un estudio de artrografía (inyectar medio de contraste en la cadera y valorar que obstáculo mecánico hay dentro o fuera del acetábulo que dificulte la reducción)

El arnés lo coloca el médico y suele utilizarse de forma permanente durante seis semanas como mínimo, y de forma parcial (12 horas por día) durante los seis meses posteriores.  El dispositivo permite que la articulación de la cadera se desarrolle normalmente. El bebé debe ser controlado con frecuencia durante todo este período para verificar si el arnés necesita algún ajuste y examinar la cadera. Al finalizar el tratamiento, se toman radiografías o se realiza una ecografía para controlar la ubicación de la cadera. A pesar de que se obtienen muy buenos resultados con el arnés de Pavlik, en ocasiones la cadera puede seguir teniendo una luxación parcial o total. Aproximadamente 1 de cada 20 bebés con DDC necesitan algo más que un arnés de Pavlik para corregir su malformación.
 
 LA TRACCIÓN es la aplicación de una fuerza con el fin de estirar ciertas partes del cuerpo en una dirección específica. Se efectúa mediante poleas, cuerdas, pesas y un marco metálico que se asegura a la cama o sobre ella. El objetivo de esta técnica es estirar las partes blandas circundantes a la cadera para permitir que la cabeza femoral vuelva a insertarse en el cótilo. Generalmente, se utiliza por un período aproximado de 10 a 14 días y puede realizarse tanto en la casa como en el hospital, según las recomendaciones del pediatra, el hospital y los recursos disponibles.

Si los demás métodos no resultan efectivos, o si se diagnostica DDC despues de los 2 años de vida, es posible que sea necesaria una intervención quirúrgica:

espanol.kaiserpermanente.org
  • LA REDUCCIÓN CERRADA suele practicarse en bebés de menos de 18 meses.  Consiste en colocar la cadera nuevamente en su lugar de forma manual mientras el bebé se encuentra bajo anestesia. Si se realiza con éxito, se le coloca un yeso especial (llamado yeso pelvipédico) al bebé para sostener la cadera en su lugar. El yeso pelvipédico debe utilizarse durante un período de tres a seis meses aproximadamente, y es necesario cambiarlo regularmente para adaptarlo al crecimiento del bebé y para reforzar su rigidez, ya que puede ablandarse con el uso diario. El yeso permanece en la cadera hasta que ésta vuelve a su ubicación normal. Luego, puede ser necesario un aparato ortopédico especial y ejercicios de fisioterapia para fortalecer los músculos de las piernas y los que se encuentran alrededor de la cadera
  • LA REDUCCIÓN ABIERTA por lo general se practica en bebés de 18 meses o más. Durante esta cirugía, los músculos y los tejidos que rodean a la cadera se desligan para poder realinear la cadera y colocar el fémur en su cavidad. Los músculos y los tejidos se suturan una vez que la cadera está realineada.
 Se requiere de un seguimiento clínico y con estudios radiográficos después del tratamiento y hasta que el niño termine su crecimiento.